ARQUITECTURA RURAL

ARQUITECTURA RURAL

miércoles, 29 de mayo de 2013

PEÑA FOLENCHE


Llegamos a Peña Folenche para ver la casa de la roca sin saber que esta visita terminaría en un lugar  muy interesante.

Me impresiono ver las enormes rocas sobre la casa

Después de fotografiar la casa de la roca y la panorámica del pueblo y alrededores que se podía ver desde la cima, nos paramos en detalles de paredes, puertas y todas esas cosas que tanto nos gustan, entre ellas una banqueta hecha hacía muchos años. Una señora nos dijo que la había hecho su padre y esto dio pie a una larga conversación. La señora, no recuerdo su nombre, tenía familia en Petín, otro dato que  hizo más amena la conversación. Nos enseño la roca en donde se podía ver una cara y nos dijo de otro lugar, muy visitado y del que yo siempre pensé que era un pueblo.

Nos contó que no  estaba lejos Sequeiros, no un pueblo como yo creía. Sequeiros, llamado así por ser el lugar donde se secaban las castañas. Nos indicó el camino.  Nos despedimos  hasta la próxima y comenzamos el paseo hasta el lugar indicado


El camino se fue adentrando en un soto de castaños centenario de maravillosa formas y frondoso follaje. Era como pasear por un cuento, casi puedo decir que se notaba la presencia de los duendeciños que desde algún tronco nos observaban.

Sequeiros apareció siendo como un pueblo, muchos edificios todos para secar castañas y una casona grande en muy mal estado. Se veía la importancia que tuvo en su tiempo, el trabajo de coger las castañas, subirlas al secadero y esperar hasta que ya  se habían secado, días de trabajo en convivencia y noches de cuentos y leyendas.





Para secar las castañas